Quantcast
Channel: Versos e Aloumiños
Viewing all 1127 articles
Browse latest View live

A LUZ DAS PALABRAS (69) Mar Pavón

$
0
0



Mar Pavóné unha desas persoas que son referencia na LIX deste país. É, como ela se define, “unha soñadora de historias”.
     De historias e de poemas, engado eu. Unha voz sólida, chea de matices ben ricos, que ateiga de humor, de cores e de vida os espazos que habitamos os que sempre nos consideramos nenos e nenas nun grao abondo.

     
Mar Pavón

     Si, eu gozo coas súas obras, tanto en prosa coma en verso, co seu xeito de comunicar, co optimismo do seu discurso literario. Envólvenme os seus poemas e consegue que sorría cada vez que me perdo polos seus versos. Versos directos, frescos, xogantíns, cunhas doses de humor que se agradece.

     Por estas e outras razóns Mar Pavón tiña que estar nesta sección, A luz das palabras, do noso blog-revista Versos e aloumiños.
     E está. Unha honra para todos nós.

     Non perdades ninguna palabra dos seus textos. Son pura emoción.






Soñadora







Reflexión para “A luz das palabras”


Siempre digo —lo creo profundamente— que escribo por pura vocación y, de hecho, no me recuerdo sin un lápiz en la mano. Pero en este punto del camino, después de vivir algunas experiencias ciertamente impactantes por su carácter sobrenatural, puedo aventurar que esa vocación con toda probabilidad la mantengo de alguna existencia pasada, y con ella afortunadamente sigo emprendiendo lindos proyectos, muchos de los cuales tengo el privilegio de compartir a gran escala gracias a la edición. Y aunque con la poesía la escala suele quedar considerablemente reducida por diferentes motivos, a cual más desolador, reivindico modesta pero firmemente mi condición innata de poeta, empujada, sin duda, por una ilusión comparable a la que me llevó a componer mis primeros versitos, con apenas ocho años y ya enganchada de por vida a la lectura, esa droga preciosa y perfecta que nos transporta otorgándonos —y aquí no ha lugar a aventurar y sí a la aventura misma— otras existencias en otros mundos.



Tomado de Galería risueña.





LA GOTA DE ROCÍO

Una gota de rocío
llegó hasta Belén
y el Niño chiquito
la quiso coger.
—No la cojas mi niño
—le dijo José—,
que las joyas del cielo
está prohibido coger.



Sal del salón


Un día, la niña
se hizo mayor
y dejó de hacer
ruido en el salón.
Y dejó de dar
portazos al viento;
anclado en el tiempo
quedó su fragor.

Un día, temprano,
sonó su futuro.
Fue solo un murmullo
pero despertó.
De juego manido
le habló la mañana
aunque fue el mañana
quien la conquistó.
La tarde, alertada,
vino con la siesta
y soñó despierta
en su habitación.
Mas la noche fue
la que le brindó
sueños de cuché
de mujer en flor.

Un día, la niña
se hizo mayor
y a salón de té
le olió el corazón.

Mar Pavón,
enero de 2018.
(Para el gran poeta
Antonio García Teijeiro,
con cariño, admiración
y aún más agradecimiento,
porque lo que  fue “increíble”
es que él me lo pidiera.)





CATAVENTO DE POEMAS INFANTÍS (LXVII) Mª Victoria Moreno (3)

$
0
0











                                 MARÍA VICTORIA MORENO (3) (1933-2005)





                             Conto en verso dividido en tres partes: O solpor, A noite e O Amencer





O SOLPOR


     

     No luscofusco de maio,
cando as faíscas da herba
ceden ao arrolo do vento,
quere durmir a pradería.
Aínda as flores presumidas
desafían as estrelas.
Rompen a cantar os grilos
e os ferreiriños golpean
con chíos de aceiro negro
a paz dourada e serena.


     
     Volve o gando para as chousas
e as campaíñas son queixa
polo sol, que vai dereito
camiño da fin da terra.
As sombras enchen as casas
e as nais prewparan a cea,
mais todos os nenos foxen
da música das tarteiras
porque a noitiña é fermosa
e presta disfrutar dela.


     
     O gato lambón e vago
os seus bigotes aquela
e os trasno da cadeliña

Mª Victoria Moreno
-Alma, bonita e pequena-,
aproveitando un descoido,
lisca da casa e comeza,
xunto aos nenos, o seu xogo,
mais ninguén repara nela…


  Cos seus ollos manseliños
mira docemente e prega
ser unha máis da cuadrilla
coma se fose unha nena.
Coas súas luviñas douradas
fai títeres e piruetas
e, á fin, arrédase triste
baixo a súa capiña negra.

O seu amor pola cadeliña

     
     Leva o seu rabiño a rastro,
leva gachas as orellas
e leva dentro do peito
unha doíña de pena,
tan quente coma unha bágoa
e tan donda coma a cera.


Camiña cara a ningures
Alma, a travesa cadela,
e vai coa calma do sol,
que nin para min ten présa.
-¿Qué buscas?- pregunta un moucho
que nese momento esperta.
-Volve á casa- di a voz rouca
dunha curuxa moi vella.





(Do libro ¿E haberá tirón de orellas?,editado por Galaxia. 2017)









Conferencia de Antonio García Teijeiro en la Biblioteca Nacional de España: "La poesía es esa voz que hace preguntas"

$
0
0


Miguel Albero, Director Cultural de la BNE e poeta, fai a presentación






                  LA POESÍA ES ESA VOZ QUE HACE PREGUNTAS




                                                                                                                                     ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO



Decía León Felipe en un texto poético contenido en su libro Parábola y Poesía lo siguiente: Poetas... La Poesía es una ventana... la única ventana de mi casa. Por esta ventana irrumpe la luz e ilumina todo lo que yo escribo en las paredes.

     Y sí, la poesía fue para mí esa ventana que me permitió ver a la cara el monstruo que cegaba mi vida. Una vida condicionada por la oscuridad, por la hediondez de los discursos que infectaban nuestros oídos, por la ceniza que ensuciaba los paisajes que tenía delante de mis ojos, por el corazón roto ante tanta sinrazón con la que yo luchaba en silencio, pero que me impedía ganar la batalla del miedo, de cierta cobardía y de ilusiones cercenadas por una realidad que me ahogaba.

     
León Felipe


     Yo, como León Felipe, tampoco sabía muchas cosas, es verdad, pero como él sentía que la cuna del hombre la mecían con cuentos, que los gritos de angustia del hombre los ahogaban con cuentos, que el llanto del hombre lo taponaban con cuentos y que, en fin, me habían dormido con todos los cuentos.
Algo dentro de mí estaba en ebullición pero no conseguía aflorar para vencer miedos y mentiras.

     Yo sentía ya que  necesitaba de algo- una herramienta, un arma- que desmontase la mentira en que se movía mi vida.
Y esa herramienta fue, sin ninguna duda, la poesía.
Algo me empujaba a empuñar el arma de las palabras. Pero, ¿estaba preparado para enfrentarme al monstruo? Sí y no, al mismo tiempo. Sí, porque las palabras me hablaban, me empujaban. No, porque yo no leía -he ahí la clave de la escritura de cualquier género- y al no leer me faltaba el marco esencial para hacer un discurso literario coherente y sólido. Todo se limitaba a expresar deseos, gritos heridos, puñetazos al aire y exabruptos llenos de ira. Pero la literatura quedaba muy lejos.
Guardo esos primeros intentos como algo indisoluble de mi necesidad de rebelarme con el mundo que me agredía. Fueron importantes para el joven que se asfixiaba pero no para el escritor que quería ser.

     Yo escribía versos como estos:
           
          Una bala de cañón
            un eslabón deformado
            un amor incomprendido
            Canto, lloro,... estoy cansado.
Tenía 21 años y estaba buscándome.

O como estos:
            Vida, selva arbolada
            hiedra marchita,
            cadáveres vívidos
            sombras de fulgor (...)

Pero en esto llegó la voz de alguien que mostró, con su guitarra, que había poetas que oían mis lamentos y estaban dispuestos a ayudarme a cambiar mi vida. A abrir esa ventana para que el aire putrefacto que yo respiraba se purificara y me diera alas para volar.

Paco Ibáñez


Escuchar Palabras para Juliaen la voz de Paco Ibáñez fue un asidero de emoción.
Conocer a Blas de Otero y su nos llamarán a todos fue un aviso decisivo.
Cantar a una piedra pequeña, a una piedra ligera, a un canto que ruedas, fue una luz que vi brillar en mi cielo particular con el aliento de León Felipe.

     Aquello era distinto. Aquello era sentido por mí como una flecha lanzada al corazón.
Fue la ventana que me abrió la palabra directa en la voz de un trovador que llevaba los versos a su espalda para hacernos partícipes de su lucha particular que se estaba  convirtiendo en mucho más. En muchísimo más.

     Ya andaba yo con mi música y las canciones de Bob Dylan. Ya me estaba yo convenciendo de que muchas preguntas que el bardo de Minesotta se hacía -y yo hacía mías- estaban soplando en el viento.

     
Bob Dylan

Y apareció una obra excelsa de Joan Manuel Serrat, que me abrió la ventana de la poesía de un hombre bueno, un hombre que escribía poemas desde lo más hondo de su ser: Antonio Machado. Y profundicé en esa poesía de la que él decía, hablando de ella en general "que era la palabra esencial en el tiempo".

Y de Miguel Hernández, otro descubrimiento muy especial  del que solo conocía Andaluces de Jaén.
Fue, de nuevo, Serrat quien me abrió su ventana de manera definitiva con otro disco dedicado al poeta oriolano. 




Y lloré con sus nanas de la cebolla, me estremecí con su Elegía a Ramón Sijé y pude descubrir el hondo lirismo que poseían sus versos.
Ventanas que se abrían para emocionarme con la palabra poética.



Me hice con las Poesías completas de don Antonio en una edición de Austral del año 73
            Yo, para todo viaje
            -siempre sobre la madera
            de mi vagón de tercera,
            voy ligero de equipaje (...)

Ese mismo año compré los Poemas májicos y dolientes de Juan Ramón Jiménez (ed. Losada)
            Muere la tarde. El cielo
            es de un cobre amarillo y suntuoso...,
            bandadas tristes van
            hacia un jardín ilusionado y roto (...)

Y conseguí, Marinero en tierra de Rafael Alberti también en la edición de Losada (una editorial que jugó un papel fundamental en el aprendizaje de tantas personas en una época difícil).

     No sabía cuánta importancia iba a jugar este libro en mi vida de escritor. La trilogía del mar- que yo escribí-  está propiciada por la concepción literaria que Rafael -con el que conviviría muchos años después- me acercó casi sin darme cuenta.
           
         -Madre, vísteme a la usanza
            de las tierras marineras:
            el pantalón de campana,
            la blusa azul ultramar
            y la cinta milagrera.
            -A dónde vas, marinero,
            por las calles de la tierra?
            -¡Voy por las calles del mar!

Escuchando a Paco Ibáñez irrumpió Lorca en mi vida. Un Lorca fundamental a la hora de escribir poemas para niños.
Una persona excitante. Una delicia de obra. También, de la editorial Losada, era la antología que compré del poeta granadino. Llegó para instalarse definitivamente en mi vida.
            Sobre el cielo verde,
            un lucero verde
            ¿qué ha de hacer, amor,
            ¡ay! sino perderse?

Y también León Felipe con su Antología rota (también de Losada) y otra más de Gabriel Celayay el volumen Ancia de Blas de Otero:
           
          Desesperadamente busco y busco
            un algo, qué sé yo qué, misterioso,
            capaz de comprender esta agonía
            que me hiela, no sé con qué, los ojos (...)

Yo también buscaba desesperadamente algo. No sé si misterioso, pero sí necesario. Yo me buscaba a mí mismo. Era prioritario encontrarme. Dar pasos, andar caminos, sentarse en remansos de paz para reflexionar. Y encontré eso que buscaba en la poesía.

     Yo era docente. Siempre he tenido la necesidad de enseñar. Fue mi gran pasión. Pero no quería que mis alumnos y alumnas vivieran de espaldas a la poesía. Quería que tuvieran vivencias muy distintas a las mías. Que no se encontrasen con un vacío en los momentos en que se estaban formando.
Así que les abrí mil ventanas posibles. Los clásicos que yo había descubierto, los poetas soporte, los poetas que me habían sacudido debían sacudirlos a ellos y ellas.
Introduje poemas en mis clases de manera constante. Nunca, como algo  ocasional para rellenar el tiempo.              
Les puse poemas en música, recitábamos -leyendo o de memoria- poemas escogidos para emocionarlos. Cantábamos. Nunca  olvidaré las lágrimas de una niña de 6º de EGB, cuando ella y sus compañeros entonaban y decían con fuerza el "golpe a golpe, verso a verso"machadiano con música de Serrat.

    



      Y yo compraba libros de poemas y se los regalaba. Todo me daba igual con tal de contagiar a mi alumnado con versos que los hiciesen vibrar.
Porque con la poesía descubríamos día a día (yo, el primero) mundos desconocidos pese a estar tan cerca. Porque con la poesía poníamos el acento en el conocimiento de nosostros mismos y de los que nos rodeaban. Porque con la poesía nos emocionábamos ante la belleza, con la crítica social, con los paisajes diversos, con la mirada atenta en las cosas. Le poníamos color a los espacios oscuros. Dotábamos de musicalidad aquello que nos la exigía. Sentíamos el ritmo en nuestros cuerpos, reíamos y nos sobrecogíamos. Escribíamos y penetrábamos en las esctructuras poéticas de los grandes poetas. Vivíamos disfrutando a fondo del empleo cuidado y talentoso de la palabra bien utilizada. La poesía se convertía en el “paisaje de los sueños”.


     

     Otra nube que tuve que disipar fue la traición que el régimen y el entramado social, tan deprimente, tenían con mi idioma gallego. Siempre me he sentido estafado con el ultraje y el desprecio que la lengua gallega sufrió durante muchos siglos. Fue muy duro comprobar que me habían secuestrado una parte de mi ser.
Y como yo ya estaba en una situación de rebeldía constante y de desafección por todo aquello que me había envenenado, comencé a sumergirme en la poesía de mi tierra escrita en gallego. Fue algo que me produjo tristeza y satisfaccción. La tristeza del engaño; la satisfacción del descubrimiento, del compromiso, de la belleza.

Rosalía estaba ahí, sí, pero muy trivializada en amplios sectores de una sociedad que despreciaba el gallego. Y yo, a través de un libro, creo que de Aguilar, en papel biblia, me introduje en su poesía y lloré. Lloré de emoción y lloré de rabia.
¿Estaba loco el mundo? ¿Cómo se podía mantener a una excelsa poeta como ella en el más absoluto desconocimiento? Cruel y mezquino fueron dos de los adjetivos que empleé para definir la situación. Rosalía era, sin duda, "Nai e Señora".

Rosalía de Castro
            Corre o vento, o río pasa,
          corren nubes, nubes corren
           camiño da miña casa.

            Miña casa, meu abrigo:
            vanse todos, eu me quedo,
            sin compaña nin amigos (…)

Después vinieron otros. Nombres importantes que dieron lustre a una poesía muy viva, pero que se movía en círculos casi cerrados. Puro desconocimiento orquestado. Y fui descubriendo a magníficos y diversos poetas como Curros Enríquez, Pondal, Cabanillas, Manoel Antonio, Luz Pozo Garza, Xohana Torres, Álvaro Cunqueiro(del que se desconocen sus extraordinarios poemarios), Méndez Ferrín, entre otros, hasta llegar a Celso Emilio Ferreiro, verdadero motor de una poesía reivindicativa (aunque no solo) que ponía la lucha y el idioma en boca de tantas personas necesitadas de ella. Y yo ya amaba profundamente una lengua que me habían robado.

Celso Emilio Ferreiro

Língoa  proletaria do meu pobo,
eu falo porque sí, porque me gosta,
porque me peta e quero e dame a gana;
porque me sai de dentro, alá do fondo
dunha tristura aceda que me abrangue…


     Ya dije, creo, que yo era docente. Era un maestro que también buscaba nuevos caminos para llegar a lo más íntimo de sus alumnos y alumnas.
Siempre estaba dispuesto a motivarlos, a sacudirlos a abrirles puertas y ventanas.
La poesía formaba parte esencial de mi ideario como docente. Y estaba dispuesto a que ellos la hicieran suya. Me comprometí a ello sin mirar para atrás, sin sentarme a perder el tiempo. Todos necesitábamos mucha energía y mucha pasión para conseguir los objetivos. No fue fácil porque no encontré apoyos en los compañeros. Pero me dio igual. Sufrí y trabajé en silencio conteniendo la rabia.
Descubrí casi a finales de los años setenta a un poeta gallego, que me marcaría el camino, pues también escribía para los pequeños: Manuel María y su libro en gallego: Os soños na gaiola.
Comencé a leer a mi alumnado esos poemas en un idioma amordazado, despreciado. Como este dedicado al viento:
 
O vento e o seu alento
é cousa que non se ve.
Manuel María
¡O vento ten un misterio!
¡O vento un misterio é!

Ás veces é un murmurio,
un sopro maino da brisa,
solermiño, arrolador,
semellante a unha sonrisa.

Ás veces o vento zoa,
poderoso, ameazante:
¡leva lousados e arbres
coa súa forza de xigante!


Noté como los niños se divertían escuchándolos en mi voz. Siempre he mantenido que la poesía debe entrar en las aulas y en las casas en voz alta. También les gustaba leerlos a ellos. Y hacer dibujos. Y cantarlos. Era la fiesta de la poesía.

     Yo necesitaba escribir. Siempre lo había necesitado. Al margen de los poemarios de Manuel María, no encontraba poemas que se adecuasen a niños de ocho años a los que les daba una hora de literatura viva, una hora suelta en el horario (yo daba clase a los mayores). Animado por los poemas del poeta monfortino, comencé a crear versos. Poemas incompletos pero que tenían el objetivo de ser disfrutados por ellos y ellas.
Y un día, mientras ilustraban una composición poética de Manuel María, emborroné un papel que estaba sobre mi mesa. Con una fuerza desconocida hasta ese momento, me levanté de la silla, me puse enfrente del encerado y comencé a escribir:

Tres pombas chegaron cansas,
tristeiras, preto dun neno.
O neno deulles un beixo;
as pombas non se moveron.
O neno con aloumiños
deixounas case no ceo.
O neno de brancas mans
as pombas non esqueceron.

Fue algo mágico. Algo insospechado. Algo sublime. Los niños quedaron sorprendidos. Lo leyeron. Lo copiaron. Lo ilustraron.
Ese fue el primer poema que hice de poesía pensando en los críos. Me sentí tan bien que me prometí a mí mismo que no dejaría de escribir poesía infantil nunca más. Y lo he cumplido. Y sigo cumpliéndolo.

     Además de mis poemas, fui introduciendo de manera sistemática versos de poetas, hombre y mujeres, que hacían poesía infantil desde la calidad literaria, desde el respeto hacia los pequeños, desde el amor por el lectorado.

     Compré poemarios de personas tan significadas como Gloria Fuertes, Mª Elena Walsh, Carlos Murciano, Celia Viñas, entre otros. Entré en el mundo de la literatura tradicional de la mano de Carmen Bravo Villasante o Ana Mª Pelegrín. Conocí la poesía muy ligada al alumnado, novedosa, de Federico Martín, sentí la importancia de personas como Gianni Rodari a la hora de crear un universo lleno de libertad.
Me perdí por las páginas de antologías realizadas por criterios serios y solventes para comprender lo mejor posible el amplio abanico poético de personas que hacen de la poesía pensada para  los niños (y los adultos, añado yo) un modo de vivir.

A partir del año 1988, mis poemarios infantiles comenzaron a aparecer. En gallego, fundamentalmente, -un compromiso innegociable con mi lengua-, pero también en castellano.
Yo creo firmemente en el compromiso con la poesía. En su necesidad y en su efecto placentero, lúdico pero también reflexivo y crítico.
Son treinta años de un trabajo que me mantiene en guardia frente a la frivolidad de ciertos discursos despectivos y frente a la poquísima presencia de la poesía infantil en nuestra sociedad.
Mienten los adultos cuando dicen que a los niños no les gusta la poesía. Mienten y lo saben. Quieren ocultar su desinterés afirmando cosas que no son ciertas.
Y yo afirmo en voz alta: a los niños les encanta la poesía. Pero para ello necesitan mediadores o mediadoras que crean en esa necesidad, que estén convencidos de su bondad y en que solo desde ese convencimiento contagien su entusiasmo a los pequeños. Solo así se conseguirán resultados.

     




     La figura del mediador o mediadora se hace imprescindible para que la poesía esté cerca de los lectores. No se les puede negar el derecho a que la conozcan, la gocen y hagan de ella una faceta importante en su formación. No es tarea de la escuela hacer poetas. Faltaría más. Pero sí hacer alumnos que amen la poesía. Es un derecho de formación humanística.
No es tarea de la escuela conformar sino formar el gusto en estas disciplinas. Solo así haremos lectores de poesía o, al menos, personas que verán la poesía de manera natural y positiva y la despojarán de prejuicios necios y de esa etiqueta de cursilería que se le ponía tan a menudo.
No hay presencia de poemarios en los medios de comunicación, ni de LIJ (una laguna que los define). No hay presencia en los hogares de libros de poesía. (Ay, el miedo de los adultos).
De ahí la innegociable presencia de los mediadores para llevar a cabo esta tarea imprescindible.
Pero no cualquier clase de mediadores. Mediadores y  mediadoras que deben valorar el aspecto lúdico de la poesía y en palabras de Mª Teresa Fdez. Costa Guedes, estar convencidos de lo mucho que contribuye a un mejor conocimiento del niño, de su universo, el fomento de saber ver, saber escoger, saber inventar el hecho de desbloquear la espontaneidad y de hacerlos más independiente son algunos de los rasgos que deben poseer.

Mediadores apasionados por su profesión.
Mediadores que han de emocionarse para emocionar,
que han de sumergirse para sumergir
que han de estar convencidos para convencer
            y seducidos para seducir
            y contagiados para contagiar.

No nos olvidemos de que la poesía ni se impone ni se enseña. La poesía, se filtra desde la emoción, desde la naturalidad, desde la palabra dicha en voz alta, desde el cariño y el afecto.
Solo así se podrá poner el hecho poético en el lugar que le corresponde.
Solo así se pondrá en valor el uso preciso y precioso de la palabra literaria.
Llevo muchos años luchando por la presencia de la poesía en las aulas, en los hogares, en la sociedad. No es (ni fue nunca) una tarea fácil. Hay demasiados prejuicios en contra. Prejuicios que se pueden ir disipando si decimos los versos en voz alta desde el corazón. Desde el objetivo de que cada lector haga suyo el poema que lee o que escucha. Lectores y lectoras activos que no buscan desentrañar jeroglíficos sino sentirse partícipes de lo que a ellos les está diciendo el poeta.






Hay un número enorme de poetas, hombres y mujeres, en la actualidad para acercárselos a los niños. Hay mucha calidad en lo que escriben. No hay disculpas. El espectro poético es muy amplio y podemos escoger con facilidad. Hoy en día los poetas, las poetas, no defraudan. Conocen perfectamente los senderos que deben recorrer para hacer felices a sus lectores.
No caben evasivas de ninguna clase.
La palabra poética es un tesoro que debemos descubrir y guardar para con él poder hacer felices a esos seres, auténticas esponjas que absorben aquello  que se les ofrece desde la honestidad literaria con entusiasmo y convicción.
Lo digo como alguien que lo vivió día a día durante cuarenta años de docencia. Lo digo desde el escritor que tiene muchos poemarios infantiles y que se siente muy orgulloso de estar cerca de los chavales.

He dicho escritor. ¿Y cómo me he planteado yo a lo largo de los años el hecho poético? Desde luego, nunca he intentado dar una definición plena de qué es la poesía. Me lo han preguntado mil veces y, tal vez, he improvisado para quedar bien, para que resultase bonito. Pero sin convencimiento porque yo asumo claramente que la poesía no se puede definir.



Federico García Lorca

Todo lo más, crear unos versos o unas frases, posiblemente hermosos, que se convierten en poesía pero que no la definen. Unas metáforas bellas que muestran nuestra capacidad creativa. Y nada más. Y nada menos. Me molesta esa obsesión que tienen las personas por las definiciones. ¿Hay que definirlo todo? Desde luego que no. Hay que gozarlo, evocarlo, decirlo. Hay que emocionarse. Hay que sentirlo dentro.
Yo quiero traer hasta aquí las palabras que mi amado Federico García Lorca dijo de viva voz a Gerardo Diego.

"Pero ¿qué voy a decir yo de la Poesía? ¿Qué te voy a decir de esas nubes, de ese cielo? Mirar, mirarlas, mirarle y nada más. Comprenderás que un poeta no puede decir nada de la Poesía. Eso déjaselo a los críticos y profesores. Pero ni tú ni yo ni ningún poeta sabemos lo que es la Poesía"

Ni más ni menos. Lo importante es que nazca, que llegue, que se la quiera desde las primeras edades, que nos transporte con emoción por la senda de la vida. Que se diga jubilosa en voz alta. Que nos permita tocar la belleza. Que nos acerque a quienes somos en realidad.
Porque los poemas son carreteras que nos llevan al país de nosotros mismos. Caminos con sombra que nos resguardan de monstruos bien visibles.

De mí, puedo decir que soy un viajero que viaja desde dentro hacia fuera para volver a mí mismo. Un caminante que emprende un viaje incierto a cualquier parte en busca de algo o de alguien, un viaje de dudas y de palabras en busca de las mil verdades que conforman nuestra vida. Capaz de hacerme preguntas para ver horizontes.

     




     Gracias a la poesía conseguí conocerme mejor, conseguí ser un poco más dueño de mí mismo, comprender lo que quería respirar en mi existencia y perfilar mi relación con los demás.
Escribiendo poesía expresas los sentimientos, manifiestas tu compromiso con el ser humano y contigo mismo a través de la emoción y de la fuerza de la palabra.
Poesía es refugio. Poesía es rebeldía. Poesía es tomar rumbos diversos. Poesía son experiencias continuas que te ayudan a respirar y a sentir que vives. Poesía es descubrir horizontes que den sentido a cada acción que realizas. Es estremecimiento. Es luz. Es hacerse preguntas. Como se puede advertir es muchas cosas pero que, mantengo, es imposible definir.

     Cuando en los centros de enseñanza los niños/as preguntan en qué me baso, en qué me inspiro para escribir, siempre contesto lo mismo: en la vida y en las lecturas que hago y en la música que escucho. Y los animo a que anden por esa vida con los ojos abiertos, con los oídos muy atentos y con el corazón muy receptivo y permeable a todo lo que ocurre a su alrededor. Que lean poesía. Que se fijen en las estructuras. Que sientan el poema.

Ese poema escrito por los muchos hombres y mujeres que escriben desde el corazón para hacerlos felices. Que los aman y lo demuestran con la escritura dedicada a ellos y ellas. Hombres y mujeres que se llaman María Elena, Gloria, Carlos, Antonio, Mar, Beatriz, Ana María, Xoán, Antón, Raúl, Mª Jesús, Gabriela, Fran, Helena, Manuel María, Enrique, José, Carmen, Carles, Miquel, Juan, Marisa, Celia, Adriano, Jaime, Pedro, Margarita, José Antonio y tantos otros que han hecho y seguirán haciendo las delicias de los pequeños a través de sus poemas.

     Poetas que siempre serán capaces de plasmar en sus versos las miradas de tantas personas que son capaces de emocionarse con la palabra poética.
     Que, como ha escrito mi amigo y gran poeta Juan Carlos Martín Ramos, puedan dejar un deseo poético en versos como estos:



Juan Carlos Martín Ramos
Quiero escribir un poema
que nunca antes se haya escrito,
que cada vez que lo leas
sea distinto.
Que cuando cuente un secreto
te hable al oído,
que si quiere protestar
lo diga a gritos…


Hermosas palabras. Palabras desde el corazón. Palabras  que mojan y que acarician.

Y luego, en el desarrollo de mis sesiones con ellos, les pregunto a los niños y niñas,  si son capaces de acertar cuál es mi palabra favorita.
El torbellino de voces puebla el aire. Y rara vez dan con la respuesta adecuada.
Se asombran cuando les digo que mi palabra favorita es la palabra palabra. Entonces les aclaro que con las palabras que utilizamos podemos llevar a cabo todo lo que fueron diciendo.

     Sí, la palabra. Porque yo amo profundamente las palabras. Desnudas o vestidas. Tristes o alegres. Conquistadas o perdidas. Siempre estoy en actitud constante de retenerlas, de tocarlas, de sentir que forman parte de mí.
Porque, hace ya bastante tiempo, me di cuenta de que me las había robado un viento miserable que no quiero recordar. Un viento cruel y frío insensible al calor.

Leyendo al poeta gallego Bernardino Graña, di con unos versos hermosos que decían:

O vento levou follas e palabras, / levou rumor e ruído.
Entonces, me hice fuerte y escribí:

Que as traia de novo,
que quero berralas,
que quero dicilas
ben forte as palabras.
Levounas o vento
a cambio de nada.
Deixoume unhas follas,
rumores, borralla.
Palabras fermosas.
Palabras gastadas.
Palabras. Palabras
no vento zoaban.

Sí, sonaban en el viento, buscando preguntas.
Y yo solo fui capaz de hacerme esas preguntas en voz alta.
Esas preguntas que la buena poesía se hace sin saber si alguien le va a dar respuestas.
Quise expresar deseos y cogerlos con la mano si estaban en el aire.
Otra de las funciones del poeta.
Pero después de tantas andanzas solo quiero expresar este deseo profundo:
Que los niños y niñas se emocionen con la palabra literaria y que no dejen que ningún viento traidor, tenga la forma que tenga, se las robe.
Esa sí será una buena manera de crecer por dentro y de prepararse para una vida que no les va a regalar nada.


Muchas gracias.

REMUÍÑO DE LIBROS (47) "Leonardo e os fontaneiros", de María Victoria Moreno

$
0
0





AUTORA: María Victoria Moreno.



ILUSTRACIÓNS: Manuel Uhía.




EDITORIAL: Galaxia. Colección: Árbore.





Leonardo e os fontaneirosé unha novela realista onde a súa autora, María VictoriaMoreno, escritora homenaxeada nas Letras Galegas deste ano, é quen de penetrar no universo dos adolescentes e amosarnos o mundo segundo a súa perspectiva.

     Esta obra viu a luz primeiro na editorial SM e xa a partir de 1986 en Galaxia. Na colección Árbore saíu en 1990. Colección que foi codirixida  dende a súa creación en1988 por María Victoria Moreno, Antonio García Teijeiro e David Otero, e que tanto achegou á calidade literaria da nosa LIX e doutras coas traducións ao galego.

 
María Victoria Moreno
     
     Leonardo e os fontaneiros engaiola a calquera lector que se deixe levar pola palabra ben construída para argumentar e descubrir o seu poder. Así, coñecemos a través dela a tenrura e a diversión pero tamén a tristura e a crítica que invita á reflexión e que se agocha nas súas páxinas. Trátase dunha novela na que a súa autora deita gran parte do que van ser temas recorrentes, pois coma profesora sabía que a educación dos nenos e adolescentes é o mellor xeito de combater a ignorancia, as inxustizas e desigualdades de calquera tipo e apostar por un futuro plural, equitativo e máis solidario. Deste xeito convida o lector a coñecer a Antón, o seu protagonista e mais a Leonardo, un can da rúa, que se vai converter no seu confidente e, xa que logo, amigo dos fontaneiros, os compañeiros de curso de Antón.
     
     A historia desenvólvese ao longo de todo un curso escolar, oitavo de EXB e vai supoñer unha viaxe iniciática cara á madurez de todos os seus protagonistas, ao ter que enfrontarse a diversos conflitos tanto escolares como persoais e morais e mesmo  ao significado da ausencia como aprendizaxe futura.

     E así, a través da ollada de Antón reflicte a importancia da amizade, do amor aos animais, do respecto aos demais, aínda que non opinen o mesmo, da honestidade, pero tamén sinala o mundo das aparencias e dos prexuízos envoltos sempre coa pátina da ignorancia.
      
     Está estruturada en vinte e sete capítulos curtos sustentados no emprego dunha prosa fluída cunha linguaxe coidada e que se poden ler de xeito lineal ou non, segundo o gusto do lector, como ben indica a autora ao comezo do libro: “Fai o que queiras, amigo, perole o libro, que para iso o escribo. E que che preste.”

As expresivas ilustracións de Manuel Uhía  danlles vida aos personaxes e están en sintonía co ton textual.



                                                                                           

                                                                                                       ALBA PIÑEIRO

Juan Senís escribe en "Dulce Pepinillo" sobre "Poemar o mar", de Antonio García Teijeiro

$
0
0




De cando en vez, un atopa en internet cousas que lle producen unha grande alegría. Isto ocorreu hai uns días cunha crítica a fondo do meu poemario Poemar o mar.

No blog Dulce Pepinillo, Juan Senís Fernández fai unhas reflexións sobre o libro que me emocionan. Son reflexións contextualizadas no panorama lingüístico español e unhas inmersións nos poemas polo miúdo que me deixan tan sorprendido como feliz. Non deixa ningún cabo solto.

E o mérito do autor está, ademais, na súa lectura en galego. Como se agradecen estas actitudes abertas cara aos idiomas minorizados do estado.
De aí que se refira nunha liña a que o poemario non estaba traducido ao castelán (foi escrito no mes de febreiro), algo que agora mesmo, afortunadamente, xa non ocorre.

EnVersos e aloumiños publicamos integramente este “moito máis ca unha crítica”, porque o seu esforzo e mais a súa visión do poemario así o merece.

   Moitas grazas, Juan.








SOBRE POEMAR O MAR, de ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO. Crítica de JUAN SENÍS FERNÁNDEZ no BLOG “Dulce Pepinillo”.


No se me ocurre mejor manera de volver a la actividad – esperemos – normal y continuada en este blog, con el que he sido un poco descuidado y negligente en los últimos tiempos por diversos motivos que ahora mismo no vienen al caso, que reseñando aún a principios del año 2018 uno de los acontecimientos de la poesía infantil hispánica del pasado. Porque eso es sin duda Poemar o mar, un poemario con el que Antonio García Teijeiro añade un jalón más en su larga trayectoria poética, bien conocida por los lectores infantiles y por todos los que nos dedicamos en alguna medida a las letras escritas para niños, y más aún en el ámbito de la LIJ gallega, donde es uno de los clásicos vivos ya.
 
Foto de Ricardo Grobas
Poemar o mar, aunque publicado en 2016, merece ser sacado a colación ahora por dos razones fundamentales.

La primera de ella es la más evidente y la que – he reconocerlo así, porque es la verdad – ha hecho que yo conociera este libro publicado en gallego, aún no traducido al castellano y, por lo tanto, circunscrito por un tiempo al sistema literario infantil de su lengua original. Se trata ni más ni menos de la concesión al mismo del Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil en su última edición. Es, como vengo diciendo, un acontecimiento porque hay muy pocos libros de poesía para niños que lo hayan logrado. 

El último fue Miquel Desclot (con un libro en catalán, por cierto, Més música, mestre), y antes solo existía el precedente de Carmen Conde en 1987, con Canciones de nana y desvelo.


El hecho de que se trate de un libro en gallego y de poesía es reseñable, pues parece que en esta ocasión el jurado no tuvo reparos en mirar a la periferia lingüística y literaria y premiar una obra de indudable calidad, aunque no pertenezca a las corrientes principales de la LIJ peninsular. Pero esta misma circunstancia nos debería hacer reflexionar sin duda sobre la poca permeabilidad que existe entre los distintos sistemas literarios infantiles de la península, ya que yo mismo no tengo reparos en reconocer que este libro no habría llegado a mis manos y por lo tanto a este blog a no ser que hubiera sido galardonado por el Premio Nacional de LIJ. Es algo que deberíamos, entre todos, hacérnoslo mirar, aunque quizás no sean estos los mejores momentos para reivindicarlo.



Sin embargo Poemar o mar es sobre todo un acontecimiento porque se trata de una obra literaria de indudable calidad, un ejemplo indudable de cómo se puede renovar un tópico literario ya muy tratado, como el mar, y hacerlo con una propuesta literaria completamente apta para niños pero plena de relumbrón poético. Más aún si tenemos en cuenta que forma y culmina una trilogía dedicada al mismo tema y compuestas también por los volúmenes En la cuna del mar y Palabras do mar, que no he tenido aún la oportunidad de leer (cosa que tampoco me importa reconocer desde aquí).  



Como la mayor parte de los libros de poesía escritos para niños, todos los poemas que forman Poemar o mar giran en torno a un tema central que queda destacado desde el título. Esto suele ser muy habitual, porque es una manera de introducir a los niños en la lectura a través de un peritexto orientativo que les haga saber cuál es el tema del libro. Sin embargo, en este caso, el título está muy lejos de ser solo informativo o denotativo. En el título encontramos ya toda una declaración de intenciones estética, no solo temática, que recoge el espíritu del poemario y que nos adelanta lo que después el lector va a encontrar.



Poemar o mar significaría “Poemar el mar”, es decir, hacer poético el mar, o llevar el mar a la poesía, y elige el autor, en un hallazgo morfológico deslumbrante, hacer un verbo de la palabra poema y ofrecer un título ya rimado y con indudable gancho (y, por cierto, fácil de traducir al castellano). La poesía – nunca me cansaré de repetirlo – consiste sobre todo en sacar a través del lenguaje ese envés oculto y a la vez iluminador que se oculta tras las cosas más prosaicas que estamos acostumbrados a ver día a día, y en este sentido Poemar o mar lo hace con una realidad que a buen seguro para el autor – permítasenos un poco de fabulación, ya que no le hemos preguntado –  es una realidad con la que convive día a día, a la que ha interrogado durante sus años de vida y de la que ha obtenido algunas respuestas tal vez inesperadas. Pero, aunque no fuera así, el mar ha conformado el imaginario gallego, y, en consecuencia, Poemar o marno solo se ofrece como una tentativa de trascender una realidad ya existente, sino también de adentrarse en las galerías del imaginario que el ser humano ha construido a partir de ella. Pues no es otra, en definitiva, la función final de la poesía. 

Antonio García Tejeiro echa mano en Poemar o mar de una variedad de recursos realmente asombrosa y deslumbrante, lo cual demuestra que se trata ya de un poeta en la plenitud de su obra, con gran dominio de sus registros, pero que no se duerme en los laurales de la versificación fácil. El volumen es en sí mismo un excelente testimonio de lo que la poesía para niños – la buena poesía para niños, por supuesto – puede dar de sí y a qué cotas puede llegar sin caer en la reiteración y en la autoindulgencia.



Así, durante estas páginas podremos encontrar poemas que personifican el mar (“Quere o mar o que non ten: / quere flores / de colores / quere rosas / olorosas”; “Ten trenzas / o mar?”; “O mar / anda murcho / e teme dicir / que o lixo dos homes / o quere ferir”)y que en ocasiones cobran una dimensión humorística que sirve de descargo al lirismo predominante (“Cando lle dixeron ao mar / que tiña la tensión alta, / quiso deixar o sal / e converterse nun estanque”; “Nunca dixo o mar / que o mareaban / as ondas. / Por iso, sen dicirllo a ninguén, / toma pílulas / de algas”).

Tampoco renuncia el autor a hacer guiños a una poesía más narrativa con ecos de romance en algunos momentos (“Unha serea poeta…”; “Era un meniño algo raro”; “Perdéronse uns mariñeiros”),y tampoco a incluir a veces recursos propios de la poesía popular, como enumeraciones y las reiteraciones, que la mayor parte de las veces saben conectar con el lector infantil al usar elementos de su propio imaginario para hablar del mar, con las notas musicales o los colores.
 
Con Rafael Alberti en Madrid
Hay, además, sitio para las imágenes audaces e iluminadoras, la reflexión metapoética, para el culturalismo (en la serie CATRO POETAS CONVERSAN NA BEIRA DO MAR, dedicada a Rafael Alberti, Juan Ramón Jiménez, Juan Kruz Igerabide y Juan Carlos Martín Ramos,estos últimos grandes poetas para niños de hoy), la reflexión metapoética (“Atopei / unha palabra / que rima / co sorriso do mar: sorrimar”) o la creación de haikus, al final, que ya se ha convertido en una estrofa bastante habitual de la poesía hispana para niños.

Con Juan Kruz Igerabide e Juan Carlos Martín Ramos

Este intento de ofrecernos una cara inédita del mar a través de las palabras encuentra su réplica en el trabajo del ilustrador, Xan López Domínguez. Poemar o mar no es un álbum poético, es decir, un libro en el que haya una trabazón tal entre texto e ilustración que estas se conviertan en algo imprescindible; se trata más bien de un libro de poesía ilustrado – lo cual no es ninguna crítica, ni está dicho en sentido peyorativo – de pequeño formato y tapa blanda, pensado, según el peritexto orientativo de la contracubierta, para niños de nueve años en adelante, lo cual – y esto sí es una crítica – me parece un poco exagerado, porque creo que en el interior del libro hay poemas que un niño más pequeño puede disfrutar.

 
Juan Ramón Jiménez

En cualquier caso, y sea la edad que sea, se trata de un volumen concebido para lectores ya autónomos y más experimentados, que siguen agradeciendo la ilustración para tener un asidero interpretativo y una ayuda fabuladora, pero a los que ya no les hacen falta las imágenes para la lectura. Aun así, las ilustraciones en este libro tienen una presencia importante, ya que acompañan a casi todos los poemas. Y he aquí que, de la misma manera que para el poeta escribir sobre el mar puede ser un desafío, para el ilustrador también lo es, y en un doble sentido: por una parte, porque debe huir de los tópicos visuales que existen ya sobre el motivo; y, por otro lado, porque ha de dar réplica en la medida de lo posible al mundo poético que crean los propios versos.
En sus ilustraciones, con gran protagonismo de la línea y el dibujo y de trazos limpios, López Domínguez opta por huir lo más posible de la representación directa del mar, que aparece en contadas ocasiones a lo largo de las páginas y siempre de una misma manera estilizada y casi sólida, que recuerda a caracolas y funciona de leit motif no invasivo. Por lo demás, el ilustrador evita, a mi juicio con gran acierto, personificar el mar de manera plana y fácil y propone soluciones menos evidentes, como ocurre en el poema, ya citado, “Quere o mar o que no ten”, en el que vemos un gato soñador, pero tampoco tiene reparos en usar representaciones más literales de los poemas narrativos o en proponer soluciones cercanas al poema visual, a través de metáforas y superposiciones. De esta forma, al igual que el poema evita la repetición de recursos, el ilustrador hace lo propio con la reiteración de soluciones visuales.
 
Ilustración de Xan López Domínguez
Pero lo que, a mi juicio, mejor caracteriza Poemar o mar es el juego tipográfico que se establece a lo largo de todas sus páginas, más que nada porque en este caso, como en muchos otros, se puede decir que la tipografía es el mensaje, y al igual que el mar va y viene hacia la tierra en un proceso invasor y a veces destructor e incontenible que no podemos como hombres controlar, la poesía en estas páginas en blanco se desbordan y se expanden con la imprevisibilidad de las olas, que tienen siempre el mismo movimiento pero que nunca se sabe dónde van a llegar, si van a alcanzar un punto más alejado de la orilla o van a saltar y dar una pirueta más audaz en el aire. De esta misma manera, los versos de García Teijeiro se van desplegando por el papel de manera imprevisible, de tal manera que volver la página es exponerse a la imprevisibilidad y el capricho del lenguaje poético, de la misma manera que pasear por la orilla del mar y detenerse a contemplarlo es exponerse a su propio carácter indescifrable y fascinante. Por ello, quizás, nunca mejor elegido el título de este libro: Poemar o mar.   


Día da presentación de Poemar o mar en Vigo

                                                                                                                      
                                                                                                                 JUAN  SENÍS FERNÁNDEZ

POESÍA DE Mª VICTORIA MORENO no "Arroás", O BARCO DE "Mar adiante".

$
0
0


publicación de Mar adiante (Ediciós do Castro, 1973), de María Victoria Moreno,  foi un fito importante na literatura galega para nenos e nenas. Un dos libros pioneiros en Galicia xunto a orixinais de Bernardino Graña, Carlos Casares, Neira Vilas , Manuel María ou Xohana Torres.
     
     Nuns momentos nos que nas escolas non había libros na nosa lingua e calquera iniciativa neste sentido estaba chea de atrancos, estes escritores/as abriron camiños que tentaban eliminar tanta eiva no ensino, se de literatura galega falamos.
    
María Victoria Moreno
     María Victoria, que tanto quería os nenos e nenas, escribiu un libro poético, ateigado de soños, unha escola no mar (O Arroás, que así se chamaba o barco). Nel, Xosé Luís, o capitán, explicaba á rapazada o valor das cousas cativas e insistíalles que esas cousas cativas son propiedade das persoas, e que as persoas, aínda que teñan moitos cartos, moitos leiros ou moitos barcos, non deixan de ser pobres no seu corazón.
     

     E,como din Fina Casalderrey e Marilar Aleixandre no libro María Victoria Moreno, a muller que durmía pouco e soñaba moito, (Ed. Xerais), lendo esta historia decatarédesvos de que a autora foi quen de se meter na pel da mestra que pon na escola no mar; de Miguel, o vello mariñeiro de Portosouril que non sabe facer barcos de guerra pero si barcos escola; de Lola a cociñeira e inventora de palabras; do capitán Xosé Luís que “tocaba a guitarra coma os anxos”, dos nenos, das estrelas, das gaivotas, dos ventos… Vese que está de parte deses  mestres e mestras que seducen, de aulas onde cada día é especial, e non a favor dos que ameazan con atar os libros ao pescozo dos nenos e nenas e guindalos ao mar por, un supoñer, non saberen a táboa do sete.
     

     Toda unha declaración de intencións sobre a concepción que María Victoria Moreno tiña do ensino.
     
     


     Pero, como non podería ser doutro xeito, Mar adiante está cheo de poesía. Tal como foi pensado, todo el é poesía. Ademais, ao longo das súas páxinas, imos atopar algúns poemas de distinta extensión que me permito tirar do libro para que poidan ser saboreados por todos aqueles e aquelas que aman a poesía.
    
O libro comeza con este poema:


Eu escribín este libro
para ti, que o tes na man,
e vas ser por un tempiño
marineiro do Arroás.

Cóntoche o pouco que sei
do campo, do ceo e do mar
para que non lle deas creto
a quen che queira falar
de lobos que comen nenos
na sombra do carballal.

Págome moito pensando
que te podo eu axudar
a descubrir os segredos
que conta o vento ao zoar.

Mais, para facer xustiza,
cumpríame confesar
Ilustración de Fino Lorenzo
que unha meniña xeitosa,
voz de prata, doce ollar,
medosiña polas noites
e risoña nas mañás,
foi quen me dixo que ti
tamén querías escoitar
os contos que eu lle contaba
cada tardiña no lar.

Chámase María Begoña
e queríalle eu dedicar,
co teu permiso, amiguiño,
as historias do Arroás.

     Unha dedicatoria en verso para a súa filla Begoña.
     

     E os mariñeiros  de Portosouril contan que todos os navegantes de Galicia, ao veren a luzada desta vila, cantaban:


Ollando Portosouril
o vento da miña terra
coido que chama por min.


Máis adiante, Lola espertou cediño, viu o sol, fixo o chocolate e foi ao camarote dos nenos cantando:

Raparigos do Arroás,
fóronse as nubes do ceo
e érguese o sol dende o mar…
Non sexades preguiceiros
¡Vinde todos almorzar!

     

     Xosé Luís , o capitán, tocaba a guitarra na proa e os mariñeiros, cantaban:

Veciños de Carballeira,
chorade polos paxaros
que voaron mar adiante
tristeiros e alporizados.

Cando o vento vén do monte,
do monte da Carballeira,
párcenos sempre que chora
cunha queixa moi tristeira.

As árbores da Carballeira,
os carballos silandeiros,
aínda soñan cos paxaros
que antes nela estiveron.

     
     No Arroás contábanse historias. Unha delas, a de Clarisca, que era moi amiga do vento. E había poemas na historia.


Vou procurando mociña
Debuxo de María Victoria Moreno
entre as herbas dos camiños.
Son mozo e rico, Clarisca,
¿vasme querer por marido?

Ai, vaite, vaite, mociño,
porque eu teño o corazón
moi lonxe destes camiños.

     
     Araceli, unha meniña soñaba e mentres soñaba, choraba. Lola acochouna coas sabas e cantoulle unha nana que inventaran os rapaces:


Ruliña sen niño,
paxariño pobre,
pechas os olliños,
non choras e dormes.


    Como se pode observar, hai moita poesía en Mar adiante, tanto na idea das historias coma en perlas coma estas.

     
    María Victoria Moreno amaba fondamente a poesía e esta formou parte da súa esencia coma persoa e coma escritora.

                                                                                                          ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO

LEMBRAR E SEGUIR AMANDO A MARÍA VICTORIA MORENO

$
0
0



Lembrar a María Victoria Moreno resulta un pracer e, á vez, provócame unha certa tristura.
     Pracer porque foi unha experiencia moi rica para min estar en contacto cunha gran muller. Tristura porque se nos foi dun xeito cruel e inxusto.
     

     María Victoria foi sempre unha muller forte, aínda que podía aparentar unha certa debilidade. Non,  en absoluto. Era quen de camiñar polos camiños máis difíciles coa convicción de estar facendo as cousas que os seus desexos profundos lle ditaban.
 
Mª Victoria Moreno
     María Victoria creou espazos de afectos e neles, coma algo inherente, estaba a súa literatura. Foi creadora e foi tamén unha muller adiantada ao seu tempo a nivel social e humano. Participou en proxectos de loita a prol dunha lingua que amou axiña, dunha literatura á que deu brillantez e dunha maneira de estar nesta sociedade en continuo compromiso. María Victoria, sen sabelo, foi unha activista cultural a prol do galego e da nosa cultura.

    Coñecela foi un deses feitos que fan da túavida algo gratificante. Derrubou barreiras co convencemento de que era preciso derrubalas.
     Eu aprendín moito dela. Porque María Victoria tiña unha concepción da literatura moi clara: que estivese pegada á xente, que fose moi coidada lingüísticamente, que emocionase e que fose lida. O seu respecto pola escrita foi admirable. Cría na necesidade literaria pero sempre dende a dignidade.

     María Victoria Moreno foi unha muller que quería moito. Si, quería moito a súa familia, quería moito o seu alumnado, quería moito os animais, quería moito os lectores e lectoras, quería moito a literatura. Si, quería moito.

     Compartir con ela a creación da colección Árbore foi unha experiencia impresionanate. Axiña sentín o seu agarimo. Decateime sen tardar que era unha muller moi estrita á hora de valorar os orixinais que chegaban. Era estrita e rigorosa dende o cariño. Pero dicía as cousas ben claras. Co seu pito na boca, coa ollada firme e tenra á vez, ía debullando o seu criterio sobre a publicación (ou non) dos textos que nos chegaban. E provocaba o diálogo. Deixaba falar. Escoitaba. Tanto David Otero coma Carlos Casares, Manolo Janeiro, Pilar Sampil coma min, respectabamos moito as súas opinións, porque nunca carecían de argumentos. Non sempre estabamos de acordo mais iso provocaba un debate fermoso do que todos saïamos moi contentos.
     


     María Victoria animoume moito a escribir prosa. Dábame consellos e valoraba o que eu facía. Ela propúxome presentar Versos de agua cando viu a luz en 1989. Foi unha presentación marabillosa polas palabras que dixo aquel día, polos versos que leu, pola sensibilidade poética que posuía.

     
Presentando "Versos de agua" en Vigo. 1990


     A súa opinión sobre A teima de Xan foi decisiva para que eu non rachase o orixinal ao ser rexeitado polo meu admirado Casares. Dixérame Carlos que había pouca separación entre o contado e a miña persoa. Nunca comprendín esa opinión pero acepteina , iso si, algo defraudado. María Victoria leuno e encantoulle. Impediu, xunto coa miña muller e un libreiro, que me desfixese del. Máis adiante  Xosé Antonio Perozo e Carlos Lemapublicaría no na editorial Sotelo Blanco. Eu fun feliz. Ela, moito máis.

     

     
     A obra de María Victoria Moreno é unha homenaxe á literatura e ao ser humano. Toda ela está envolta en emoción literaria. Ela, coma min, non concibía a arte en xeral sen o lado emotivo.  A súa obra ten un estilo pulcro e delicado. Emprega un léxico coidado e o seu discurso móvese sempre entre o rigor e a exposición clara para que poida ser saboreado polas lectoras e lectores e así acadar o obxectivo da reflexión e da beleza por parte destes.

     A tenrura coa que dota os seus escritos é outra das características de María Victoria. Porque ela era unha muller tenra e os seus personaxes están envoltos nesa tenrura. Ela amaba o ser humano e, xaora, amaba eses personaxes que circulan polos seus textos.

     
Nunha homenaxe  póstuma en Moaña. 2006.

     María Victoria veu cear á nosa casa moitas veces. E nós, estivemos tanto na súa en Pontevedra, coma no apartamento que tivo en Sanxenxo. Os meus fillos adorábana. Ela tamén a eles. Por que?  pois porque María Victoria despedía un afecto que te cegaba. Todo o afecto que enche as liñas que escribía. Que ben escribía novelas, relatos, contos en verso, tan auténticos, tan próximos á xente, porque se basean na xente, nos seus conflitos, nas súas dúbidas, na necesidade que teñen de ser eles mesmos, no amor…

     
Cos meus fillos na nosa casa
     
     Ler Mar adiante, Leonardo e os fontaneiros, Guedellas de seda e liño ou Anagnórise, entre outros, resulta un gozo difícil de expresar. Está a súa vida de soñadora, de muller en loita, de compromiso nas súas liñas. Pero está porque zumega autenticidade, porque nace dos seus soños. porque, en definitiva, conxuga literatura e vida coma ninguén.
     E se lemos os contos rimados contidos en Eu conto, ti cantas ou ¿E haberá tirón de orellas? a emoción, a calidade e o amor polos animais e polos pequenos lectores e lectoras chega a engaiolarte.

     
Na nosa casa

     Eu entendín o amor aos animais – aos cans en especial- á beira de María Victoria. O que ela sentía por eles facíache pensar. Contaxiaba a súa ledicia de telos, de acariñalos, de facelos partícipes principais da súa vida. Debo admitir que tardei ben tempo en ter un can. Porén, afirmo que cando Dark chegou á nosa casa, pensei en María Victoria.
     E, coma María Victoria, escribín un conto a ese animal tan agradecido. E  Dark apareceu nalgún libro máis. Coma Nica, coma Alma
      


     Mais logo a canseira puxo
á liberdade o seu freo:
as patas febles de Alma
daquela se entumeceron
á vez que as plumiñas teixas
a axilidade perderon (…)
                                  

                                              (de ¿ E haberá tirón de orellas? Ed. Galaxia.


     Os olliños de Nica
poñíanse tristes
nun laio de cristal
e de acibeche.

           Ás tres e media,
           cando volvía da escola,
           choraba ela.

-Orellas de veludo,
¿que estás pensando?
Agora teño clase,
mais logo saio.
                            
                                                          (De Eu conto, ti cantas… (Ed. Xerais)


     Así era María Victoria Moreno. Unha muller que soñaba e facía soñar. Unha muller dunha firmeza impresionante. Forte e sensible. De reaccións bruscas se a situación a amolaba, que axiña trocaba en calma.
     Unha muller que respiraba  humanidade e tenrura polos poros da súa pel.         
     
     Que feliz  decisión a de dedicarlle o Día das Letras Galegas!

     Canto fixo pola nosa LIX cos seus libros e coa súa actitude en momentos escuros e difíciles!

     Oxalá os seus soños pousen en nós e nos permitan seguir loitando.

      
Cuberta de Fino Lorenzo para o libro "María Victoria Moreno. A muller que durmía pouco e soñaba moito".

     E non me resisto a rematar este texto sen poñer  esta reflexión da propia María Victoria e a súa relación con Galicia:


      A miña relación con Galicia e a miña opción pola súa lingua é simplemente unha historia de amor, na que non falta ese compoñente de sufrimento que é consubstancial a todas as historias de amor.

En Pontevedra. Presentación do monográfico sobre MVM con Susi, Begoña e Pedro Ferriol.2018

                                                         ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO

DE CORAZÓN Y ALMA: EL EPISTOLARIO DE CARMEN LAFORET Y ELENA FORTÚN

$
0
0
Carmen Laforet
En 1947 hacía apenas tres años que Carmen Laforet había ganado el Premio Nadal con su ya clásica novela Nada. También fue ése el año en el que inició una larga e intensa relación epistolar con la escritora madrileña Elena Fortún, famosa por ser la creadora de los inolvidables y exitosos libros de la saga de Celia (y otros ilustres personajes como Cuchifritín, Matonkikí o Mila), que han trascendido el ámbito de la llamada literatura infantil para convertirse en clásicos de la literatura española del siglo XX, así, con mayúsculas. Laforet, que era notablemente más joven que Encarna Aragoneses—pues éste era el verdadero nombre de Elena Fortún—, conocía a la perfección la serie de Celia, ya que se contaban entre sus primeras lecturas de infancia. En esto, todo hay que decirlo, me parezco yo mismo a la gran escritora canaria, pues, como muchos otros niños, yo leí muchas de las obras de Celia siendo muy pequeño. Mi padre las tenía en sus pobladas estanterías, en algunos casos en primeras ediciones de los años 20 y 30 que habían pertenecido a su madre, mi bisabuela que falleció en la década de los 60 sin haber podido yo conocerla en persona.


Elena Fortún
Volviendo al epistolario, a Laforet le parecía casi increíble poder entrar en contacto con Fortún, una autora que había idolatrado desde niña y con la cual solía mantener conversaciones imaginarias en sus años mozos. Por su parte, Fortún admiraba el estilo literario de Laforet, llegando a considerarla en una de las primeras cartas que se intercambiaron, como "la primera escritora española" y describiendo Nada como la mejor novela publicada en España en la primera mitad del siglo XX. Durante los cinco años que duró la correspondencia entre ambas, Fortún vivió a caballo entre su exilio argentino (su esposo, Eusebio Gorbea, que se suicidó en Buenos Aires en 1948, había sido un militar republicano de los que perdieron la Guerra Civil), su regreso a España y una visita truncada a los Estados Unidos, donde vivía su hijo. A lo largo de las misivas que ambas se enviaron se evidencia la admiración mutua de las dos escritoras, el enorme cariño que sentían la una por la otra y la inmediata conexión que se produjo entre ellas pese a las escasas ocasiones en las que pudieron verse en persona.


Portada de uno de los populares libros de Celia
Emerge, además, la profunda inseguridad de Laforet en lo referente a la valía de sus obras literarias: en varios momentos de las cartas critica con dureza la novela que está escribiendo, La isla y los demonios (1952) y confiesa que solamente escribe artículos periodísticos por necesidad económica. Vemos también, carta a carta, la conversión religiosa que experimentó en estos años Laforet, animada en ello por su amiga la famosa deportista Lilí Álvarez y por la propia Fortún, y que se vería posteriormente reflejada en su novela La mujer nueva (1955). Asimismo, asistimos a la larga fase terminal de la enfermedad que acabaría con la vida de Fortún, un cáncer de pulmón que llenaría de sufrimiento sus últimos años y que le impediría cumplir su deseo de morir en paz y sin sufrimiento.


Por fortuna, el año pasado se recogió toda la correspondencia intercambiada por Carmen Laforet y Elena Fortún en un volumen titulado De corazón y alma, 1947-1952 (Fundación Banco Santander, 2017), gracias al celo investigador de Nuria Capdevila-Argüelles, profesora de la universidad inglesa de Exeter, y de dos de las hijas de Laforet, Cristina y Silvia Cerezales Laforet. El libro presenta todas las cartas que han sobrevivido y supone un documento de enorme valor para comprender las carreras literarias de dos escritoras españolas hoy un tanto olvidadas (en especial Fortún) pero que la crítica y las reediciones (sobre todo las llevadas a cabo por la Biblioteca Elena Fortún, en la que acaba de aparecer una novela inédita de la autora, Oculto sendero) están recuperando en los últimos años para el deleite de lectores de todas las edades. Se trata de un tomo, este epistolario, absolutamente recomendable y sobre el que recientemente he grabado en vídeo una reseña más extensa que dejo aquí abajo para quien esté interesado en verlo.




                                                   ANTÓN GARCÍA-FERNÁNDEZ

DARDO POÉTICO (LV) "HOWL (Ouveo), de Allen Ginsberg, a voz que sacudiu unha xeración".

$
0
0




Hai uns días vin, por fin, unha película que levaba bastante tempo nos andeis da miña videoteca.
     
     Trátase dun biopic máis que interesante sobre a figura de Allen Ginsberg e, máis concretamente, arredor do xuízo por obscenidade que tivo que sufrir o poeta por mor da publicación do controvertido poema Howl (Ouveo) dentro do poemario Ouveo e outros poemas.
     
                               James Franco recita a Ginsberg na película.

     Era o seu primeiro poemario e cambiou  a maneira de sentir a poesía nos Estados Unidos. Era unha poesía con aires de renovación, que rachaba moldes e que se afastaba do academicismo imperante, tan frío coma reiterativo.
     
     
     Ginsberg presentaba os seus versos nunha sorte de performance e envolvía os seus versos en cánticos, berros, laios, xestos… dispostos a crear un certo clima apocalíptico para denunciar ese xeito de vida acomodado, conservador, inmobilista. Eran versos auténticos, demoledores e sinceros. Versos que callaron fondamente nunha boa parte da sociedade e fixeron de Allen Ginsberg a cabeza visible e poética dunha xeración revolucionaria: “A Xeración Beat”, que tanto influiría en poetas, artistas e músicos daquela época.
     
Manuscrito dos primeiros versos
     
     Ouveoé un poema dunha forza impresionante. Posúe versos que sentes coma puñazos  na túa mente e que che cortan a respiración. Estrofas que é preciso ler (non tanto analizar) e deixarse levar polos seus efectos devastadores e penetrar na paisaxe que eses versos longos van construíndo arredor de nós.

E volvín sobre el.

Mentres o lía, ía convertendo os versos ao galego. Sentíaos moi vivos e dicíanme moitas cousas. Talvez a situación social e política na que vivimos estaba ben presente e revolvíanme por dentro os significados directos das palabras.
     
Allen Ginsberg
     De aí que me permitín escribir os primeiros versos de Howl (Ouveo) en galego a partir da tradución ao castelán por Josep Costa Prieto. É algo de traizón pero quería “tocalos e vivilos” no noso idioma. Podedes botarlle un ollo.

   
Vin as mellores mentes da miña xeración destruídas pola loucura,              esfameadas histéricas espidas,
arrastrándose de madrugada polas rúas dos negros na procura do pico rabioso,
anxos rebeldes queimando pola vella conexión celestial cara a dínamo esnaquizada na maquinaria da noite,
que pobres e esfarrapados e con olleiras e colocados pasaron a noite a fumar na sobrenatural escuridade de buratos flotando sobre as azoteas das cidades contemplando o jazz (…)

    



      Gustoume a película dirixida por Rob Epstein e Jeffrey Friedman. Contén tres historias entrelazadas: o xuízo por obscenidade en 1957, as revelacións dun artista rebelde que busca o amor e a redención e a imaxinativa viaxe a través dunha profética obra mestraque sacudiu a toda unha xeración, como ben podemos ler en Filmaffinity. Algo co que concordo ao cen por cen e que a min, o filme, a diferenza dalgúns críticos, non me resultou nin pesado nin canso. As interpretacións, sobre todo a de James Franco como Ginsberg, magníficas. Ademais, hai moita poesía nel que se agradece. Unha oportunidade, xunto coa parte de animación, de escoitar fragmentos deste extraordinario poema.

     Un filme que me  levou ao libro. Desfrutei coa relectura do mesmo e convidoume a reflexionar sobre o visto e o lido. E sentino diferente dentro de min. E lembrei a Solomon, a Kerouac, a Ferlinghetti, a Cassady, a Corso, a Burroughs, todos eles escritores dispostos a darlle a volta á creación literaria e facela máis en carne viva. Sentinme moi ben. Rabuñei sentimentos.

     
     É o que ten a boa literatura.


Con Bob Dylan diante da tumba de Jack Kerouac

                                                                                                       ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO

FIESTRA ABERTA (3): Un pracer visitar o CEIP "Isaac Peral", do Ferrol

$
0
0


Escribir para nenos e nenas (aínda que non só) ten unha serie de satisfaccións que proveñen do lectorado.
     Ás nenas e nenos gústalles ler. Á rapazada gústalle a poesía. Pero precisan de mediadores/as que lles acheguen con ilusión e convencemento a paixón lectora.
     
     Que os contaxien.
     Que os seduzan.
     Que crean na necesidade da literatura.

     Isto ocorre, sen ninguna dúbida, no CEIP “Isaac Peral”, do Ferrol. Hai aí moita ilusión. Todo recende a vida nesas aulas. Dá gusto achegarse a este centro e sentir o agarimo que agasallan aos artistas en xeral, ben sexan ceramistas, músicos, pintores ou escritores.
    
     Boa parte de culpa tena Maribel Cajide que leva ben anos facendo da súa docencia un mundo de ilusións que contaxia o seu alumnado.

     Fun varias veces ao colexio e sempre volvín co convencemento de que a literatura vive nos pequenos e pequenas , que son quen de escribir e contar os seus sentimentos diante das mostras que autoras e autores imos deixando neles.
    
Con Antonio Reigosa nunha das visitas ao CEIP "Isaac Peral".
     
      Por iso, Versos e aloumiños pediu a Maribel unhas mostras destes textos, escritos cunha ilusión exemplar.
    
     Así que aí tedes unha mostra ampla do que son quen de facer alumnas e alumnos positivamente motivados.
    

     Parabéns a todo o equipo dun centro, ao que paga a pena ir sempre.








           E outros moitos escribiron textos moi coidados que reproducimos con todo o noso cariño:















































Estes textos cos debuxos pertencen a:  Alicia, Antón Pereira (1 e 2), Beatriz (1e2), Cinthia, Julia, Lidia, Marta, Rocío, Sofía (1 e 2) e Violeta.

     Moitas grazas e parabéns!!!

FIESTRA ABERTA (4): Nace a Biblioteca "Os soños do Pirata" no CEIP "Fonte Escura", de Vigo

$
0
0



Hai  actos, cando te dedicas a escribir, que compensan nesta tarefa literaria tan solitaria e tan cega ás veces. Actos que están cheos de humanidade, de ilusión, de ganas de realizar as cousas todo o mellor posible.
     Actos, en fin, enfocados a facer máis felices aos que nos rodean e , se son nenas e nenos, moito mellor.
    

     
     Un deses momentos emotivos vivino no CEIP “Fonte Escura” en Cabral-Vigo. Chamáronme no seu momento para que inaugurase a biblioteca escolar do Centro. Non puiden negarme. Como ía facelo se considero que as bibliotecas nas escolas son absolutamente imprescindibles! E gocei, como non!, do nacemento dunha biblioteca que o propio alumnado bautizou como "O soños do Pirata".


     
     Dei no colexio cun grupo de mestras verdadeiramente marabillosas. Mulleres dispostas a cambiar a cara dun centro que está a loitar con demasiadas incomprensións. Facer visible o extraordinario labor que desenvolven. Mulleres orgullosas do seu, que miran ao lonxe para abrir novas canles.

     


     E a biblioteca inaugurouse para comezar a funcionar deseguido. A felicidade de docentes e alumnado fíxose moi evidente.  Foi un acto tan sinxelo como ateigado de sentimento e de esperanza. Eu non podía sentirme mellor.
     


     E nun momento da xornada que pasei alí con elas, contáronme o seguinte:
      Os nenos e nenas estaban ilusionadísimos coa inauguración da biblioteca do centro. Un deles, David, acompañou a súa nai e o seu irmán máis pequeño a mercar algún dos teus libros. Cando chegou á casa díxolle á nai que el tamén ía inaugurar a súa biblioteca persoal e que lle poñería o nome de Antonio García Teijeiro. (Aí está na foto). Ademais, escribiu un fermoso poema despois de ler o teu poemario Recendos de aire sonoro.

David Villar inaugura a súa biblioteca
     
     Despois de escoitar isto, como queda un?  Pois orgulloso de escribir, orgulloso de estar preto dos nenos e das nenas, apoiar o profesorado que loita por un ensino público de calidade, orgulloso de facer da poesía algo máxico… Estar moi próximo das persoas que precisan de ti é algo que se fai absolutamente necesario.



     
     Parabéns aos docentes e ás mestras coas que compartín ese día, porque son un exemplo que se debe coñecer, así como a axuda da ANPA, que resulta fundamental. Téñovos que agradecer moi fondamente o convite.



REMUÍÑO DE LIBROS (48) "O que sei do silencio", de Andrea Maceiras

$
0
0






TÍTULO:  O que sei do silencio


AUTORA:  Andrea Maceiras




EDITORIAL:  Edicións Xerais.  COLECCIÓN: Fóra de Xogo




Estiven ata  ben entrada a madrugada para rematar unha historia que me seduciu moito. Non fun quen de abandonala ata que acabei a derradeira liña, a derradeira páxina.

     Andrea Maceiras escribiu unha novela máis que interesante: O que sei do silencio, finalista do Premio Raíña Lupa, 2017. Un relato estremecedor sobre o  acoso escolar. Non é doado aportar matices novos ás historias sobre este tema que están a proliferar na LIX actual, pero Andrea Maceiras conseguiuno. E fíxoo a través da estrutura e da figura de Delia, unha acosadora pasiva con Silke coma vítima, unha rapaza sueca recén chegada ao instituto para cursar 3º de ESO.

    
Andrea Maceiras (Foto E.Xerais)

     Unha historia de silencios cómplices que rachan posteriormente cando Delia, pasado un tempo, decide crear un blog para contar o sucedido. Para contar como se lles foi das mans algo que non debía suceder. Ela mesma afirma que "son unha covarde". E afirma, tamén, o inútil que se sentiu  (era bastante asociable e precisaba de amigas que a visibilizasen) e como se deixou levar por compañeiras acosadoras como Xulia, Lara e Daniela por medo á soidade.

     Por iso, Delia abre un blog no que vai contando o sucedido. Un acerto da autora esta estrutura, porque, ademais das diversas narracións da rapaza, aparecen testemuños de Marcos, indiferente el ao longo dos acontecementos, e de persoas alleas que dan as súas opinións arredor do que len no blog.

     Salientar, tamén, os contos dunha tal Leaena Hiems, recollidos nun suposto volume co nome de "De cando fun serea". Contos de países remotos, de princesas e príncipes que teñen unha carga emocional grande e que están en sintonía co espíritu do relato.

     Hai moita crueldade na novela. Unha crueldade que fere, Pero hai tamén unha visión da vida que posúe graos diversos de sentimentos, pasos adiante e pasos atrás, reflexións e remorsos. Hai covardía pero tamén desexos afogados de asumir actitudes positivas.

     Os personaxes están moi ben perfilados -Silke é unha rapaza admirable- e a acción non só é crible senón que te convida a pensar fondamente no que alí se conta.

     
Asinando

     Encántame a escrita de Andrea Maceiras. Sígoa dende hai tempo e afirmo que é unha das mellores escritoras desta nova xeración de autoras que non só escriben de marabilla, senón que poñen o dedo na chaga da realidade que se está a vivir hoxe en día. E fano con vocación literaria. Un gran mérito pola súa parte. Denunciar, sen esa vocación literaria, sería todo menos literatura e iso ben o sabe a autora, que desenvolve a acción con moita medida e con moita intelixencia.

     Novela, sen dúbida, moi necesaria O que sei do silencio. Unha novela na que a palabra acada unha nova dimensión para explicar, literariamente, silencios que queren deixar de ser crueis para facer máis auténtico o ser humano.

     Altamente recomendable, esta novela é un paso máis na traxectoria magnífica de Andrea Maceiras que xa demostrou a súa calidade con libros como Volverás, golfiño ou Europa Express, tamén editados por Edicións Xerais, entre outros, e que tanto me gustaran.

     
     Mil parabéns.

                                                                                                    ANTONIO  GARCÍA TEIJEIRO

Xabier P. DoCampo, un rebelde con causa

$
0
0


Hai persoas que polo xeito de facer as cousas, pola actitude na vida, polo que aportan, polo compromiso que adquiren e contaxian, son únicas. Xabier P. DoCampo foi unha persoa única.
    
     Ademais de ser un grande escritor, pioneiro na LIX galega, Premio Nacional de Literatura Infantil e Xuvenil, narrador oral excepcional, Xabier era un rebelde con causa. Loitou dende sempre a prol dun ensino de calidade e en galego, comprometeuse coa nosa lingua dun xeito moi claro e abriu canles, tanto pedagóxicas coma literarias, ata os últimos momentos da súa vida.
    
Con Xavier Senín e con AGT
     Xabier DoCampo deixounos na madrugada do martes 26. E deixounos baleiros porque, cando precisabamos del, sempre aparecía co seu sorriso sincero, cun humor intelixente que rebordaba e unha xenerosidade inmensa. A de Xabier é unha ausencia que marca.Agora non o temos e parécenos imposible saber que non está.
     
     Lembro con nostalxia, neste punto, as camiñadas que escritores, escritoras e ilustradores faciamos ano tras ano. Nesas camiñadas, a simpatía de Xabier, en consonancia co seu querido Paco Martín, eran un motivo máis da felicidade que nos envolvía. Sempre optimista diante das circunstancias, era, á vez, demoledor coas inxustizas sociais, lingüísticas ou coas opinións interesadas que atacaban o sentido común.
    
Cos meus fillos Antón e Noa e a miña nora, Erin en San Simón
     Xabier tiña engaioladas a todas as persoas que o coñecían. Era un conversador fascinante que espertaba en nós unhas ganas enormes de vivir rindo. Era, tamén, un marabilloso contador de historias, na liña dos grandes escritores galegos como, por exemplo, Ánxel Fole. Era capaz, xaora, de transformar esa tradición oral que tanto dominaba en literatura escrita. O seu libro Cando petan na porta pola noiteé un claro exemplo do que estou a afirmar. Por estes relatos recibiu con toda xustiza o máis alto galardón literario: o Premio Nacional. Pero non só a tradición oral estaba presente na súa obra. Tamén a aventura e o suspense, a fantasía, a crítica, as homenaxes ou a tenrura, un certo toque de poesía e mais o humor. Todo iso e moito máis podemos atopar nun obra sólida e brillante que o mantiveron decote no cumio da literatura infantil galega.
     
Con Susi, nunha das Camiñadas.
     Falei con el por última vez cando lle pedín un texto para un agasallo especial a Susi no seu sesenta aniversario. Foi, faltaría máis, tremendamente xeneroso e envioume unhas liñas fermosas. Non podía ser doutro xeito. De novo, chamoume irmán.
    
     Agora, será moi duro saber que non o temos con nós. Quedaranos, para sempre, a súa ética e o seu agarimo. E as lembranzas. E os seus libros.
    

     Seguirei léndote, compañeiro da alma, compañeiro.

                                                                                                       ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO

REMUÍÑO DE LIBROS (49) "Allumette", de Tomi Ungerer

$
0
0




TÍTULO: Allumette.





AUTOR:  Tomi Ungerer.




TRADUCIÓN: Sandra Senra Gómez e Óscar Senra Gómez.



EDITORIAL: Kalandraka. Colección: Tras os montes.





Intelixente, interesante e necesario o labor que a editorial Kalandraka está a levar a cabo coa súa aposta de recobrar clásicos da Literatura Infantil e Xuvenil dos andeis do tempo e achegárllelos aos novos lectores a fin de que poidan ampliar a súa bagaxe lectora con autores de referencia.

    
Tomi Ungerer
     
     Este é o caso de Tomi Ungerer, debuxante, ilustrador e escritor francés de gran recoñecemento internacional e gañador do Premio Hans Christian Andersen en 1998.

         Allumette viu a luz por primeira vez en 1974 e é unha homenaxe ao conto clásico de Andersen, ao que Ungerer agradece explicitamente ao comezo do libro, xunto cos irmáns Grimm e a Ambrose Bierce polo seus traballos a prol da literatura.




     Como sucedía no clásico do século XIX de Andersen, a protagonista deste conto ilustrado é unha nena pobre e orfa que vive na rúa e que experimenta toda a crueza e ruindade dunha sociedade deshumanizada e demasiado centralizada no materialismo. Situación que se agrava na noite de Nadal ao poñerse de manifesto as grandes desigualdades sociais. A diferenza radica no desenvolvemento da acción e os seus diferentes finais, mentres que no clásico se amosa unha situación real e pesimista, neste aparece unha luz de esperanza nun futuro mellor sustentado no traballo en equipo dunha sociedade máis solidaria, plural e equitativa.


     Todo o texto vai acompañado por unhas expresivas e coloridas ilustracións onde se poden observar detalles que complementan a narración textual e permiten varios niveis de  lectura.

                                                               

                                                                                                                                               ALBA PIÑEIRO

DARDO POÉTICO (LVI) : Unha viaxe pola paisaxe íntima de Compostela da man de Rosalía Morlán Vieites.

$
0
0

Dende sempre, Rosalía Morlán Vieites, leva a poesía moi dentro dela. Ben pequena escribiu o seu primeiro poema e, desde os dez anos, o feito poético acompáñaa coma unha necesidade íntima.

    
Sanitaria é a súa profesión -, exerce como Supervisora de enfermaría no Hospital de Conxo (CHUS), así como Profesora asociada de Ciencias da Saúde na USC-, gañadora de concursos literarios, autora de libros deliciosos como  Estrelas de azucre,  Canta a lúa coas estrelasou A coitada lúa, Rosalía Morlán veu á Feira do Libro de Vigo e alí tiven a oportunidade de coñecela persoalmente. Acadou o Premio Hernán Esquío, secretaria da Fundación Neira Vilas recoñece que a descuberta da poesía infantil foi para ela unha sorpresa  e un pracer.

     Foi marabilloso o meu encontro con ela. Respira sensibilidade por todas partes e a afectividade é un trazo da súa forma de ser.
Rosalía Morlán (Foto El Correo Gallego)

     E tróuxome ese día un libro marabilloso. Un poemario, Nas rúas de Compostela, que me agasallou cunha dedicatoria chea de agarimo. Un agasallo espléndido que me emocionou. Unha viaxe poética que, a través de sentidos poemas, vai salientando as sensacións que lle producen  os lugares onde vive.
     
Fermosa dedicatoria
     Santiago de Compostela, a onde chegou de pequena para quedar, é a paisaxe que a poeta vai rememorando e sentindo por medio da palabra e as cores. Cores íntimas de quen ama fondamente un lugar e os múltiples momentos alí  vividos.

     O catedrático de Filosofía, Marcelino Agís Villaverde, di no seu precioso limiar que “Rosalía sente, esculca e pinta, cunha paleta de cores recónditas, a luz que envolve Compostela. Nas súas páxinas hai ledicia e tristura, amor e desamor, día e noite”.

     E fala deste poemario coma “ unha viaxe intelectual pola paisaxe da Compostela eterna, aquela que só se pode contemplar cos ollos do espírito. cada recanto da cidade tórnase unha experiencia metafísica, na que o ser, libre de cadeas da xeografía física, humana e política, pasea sen présas pola paisaxe dos sentimentos.”
Nunha das presentacións de Nas rúas de Compostela

      Poderoso este poemario Nas rúas de Compostela, editado por Edicións Fervenzas. Rosalía Morlán abre nel, as vías polas que os seus soños, as súas olladas no máis íntimo da cidade e a súa relación vital, se converten nun discurso poético de categoría. Un discurso que vai máis aló do individual para fundirse nunha visión colectiva e universal dos sentimentos humanos.

     Gocei moitísimo deste paseo emocional por Compostela. Deixeime acariñar  polos camiños da zanfoña, polo Santiago durmido, pola lúa azul no ceo, polos acordes do vento que fala en voz baixa ou polo ruído nos zocos na rúa.

Nun encontro con lectoras e lectores


SENSACIÓNS DURMIDAS


Escoito,
pero o silencio non fala,
viaxo polas horas, nas rúas,
buscando fantasía,
mentres a ilusión escapa
e paseniño esvaece o día.
Escoito,
apuro o paso
para escorrentar a melancolía,
espertan sen decatarme
sensacións que están durmidas.
Escoito,
ceibo os sentimentos
mentres buliga a noite
e adormece a Calderería.
O silencio non fala,
agóchase con morriña o día.





NAMOROUSE O VENTO


Namorouse o vento mainiño
unha noite en Compostela
ó mirar como as pingueiras
saltaricaban nas pedras.

Viu tan fermosa a Quintana
que xa non puido esquecela
e sen que ela o saiba
cando sopra dálle apertas.

Por iso é especial a chuvia
cando molla en Compostela,
por iso é máxica a Quintana
as noites de lúa chea.




INDIFERENZA


“Traigo penas en el alma
que no las mata el licor…”

Uns ollos cansos e tristes
unha voz chea de dor,
na caldereiría soa
a máis triste das cancións.
Pobre soñador que quere
roubarlle a música ao vento
resgando unha vella guitarra
enche as rúas de sentimento.
Mans inquedas, ollos cansos,
fermoso escenario de pedra,
mentres unha voz doce canta
arredor só indiferenza.


     
      Un poemario fermoso, magnificamente editado, que conta cuns apuntamentos plásticos moi acaídos a cada poema. Debuxos belidos do pintor, deseñador e ilustrador mindoniense Xosé Vizoso.


                                                                                                  ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO

CATAVENTO DE POEMAS INFANTÍS (LXIX) "Gaiola aberta", de Xoán Neira

$
0
0




                                      XOÁN  NEIRA  (Meilán - Lugo, 1953)








A NEVE



Caen as frías folerpas
detrás dos cristais da escola,
un manto branco cobre o chan.
Lembranzas de xogos de infancia!
Entre farrapos de nube,
un brillante resplandor
pinta o riso dun boneco.
Gozosos xogos da infancia!

Regreso aterecido
á caloriña da casa
polos carreiros ocultos.
Pegadas de xogos da infancia!

Pola mañá, cando escampe,
as mornas raiolas do día
borrarán camiños de azucre.
Perdidos xogos da infancia!

Un soño branquísimo
derreteuse entre as mans.






O CERVO



O cervo pace na herba
do amencer da primavera.

Bebe, a mañá, na fonte
o fresco orballo da noite.

Corre áxil polo monte,
silueta esbelta ao lonxe.

Sobe enriba dos penedos,
para vixiar o terreo.

Os machos teñen por cornos
núas árbores de outono.

A súa tenra figura
dorme no cubil da lúa.

Cervo gravado na pedra
pegada e memoria eterna.

                   Cervo de luz.
                   Cervo na alba.
                   Cervo de pedra.
                   Cervo na auga.






O MAR



O mar é un misterio,
un abismo azul,
unha chaira inmensa,
un manto de luz.

Desde o amencer ao solpor
espéllase nel de día
o ceo, o seu cobertor.

Nas noites limpas e claras
tamén a lúa se espella
deitando sombras de prata.

O mar é un misterio,
un abismo azul,
unha chaira inmensa,
un manto de luz.






OS RELOXOS



O latexo do reloxo
non é do seu corazón,
o dono e señor do tempo
é frío e calculador.

Non sabe de taquicardias
nin baixadas de tensión
e se se lle acaba a corda
cala o seu pesado son.

Cando adianta ou atrasa
non precisa de doutor,
non sofre estrés nin cansazo
nin unha triste emoción.

Se parasen os reloxos,
sen horarios nin obrigas,
fariamos un gran recreo
desde a mañá á tardiña.





Xoán Neira





(Do libro Gaiola aberta. Escolma de poesía infantil, 1997-2017, editado por Baía Edicións)

ESCAPARATE POÉTICO (CXVI) Francisco Cortegoso

$
0
0







       FRANCISCO CORTEGOSO  (Pontevedra, 1985 – 2016)






NADIR  DE INVERNO



PARA o final do día,
de entre o curso a media luz que navegas,
poderás observar paralizado
sobre o grao do cinabrio
ese bosque deste teu país
europeo.

Coroado
amárelo tenue
unxe
gardiá a píntega
para a memoria.





SEMPRE opostas
a rosa branca de reflexión
frente á cava de ton amable.

Sobre a primeira una araña
apenas visíbel; camuflada orla o centro
desde onde axexa a luz.

Aquela, se unha carne,
cara aos teus ollos, tenta

_
o xiro dunha pluma caída.



Francisco Cortegoso


UNHA árbore
dilátase nas vetas da pedra,
avánzase sobre olímite,
éo.
No relanzo da tarde devense
chuva.

Unha árbore enxértase na pel
doutra.
Non ten corazón máis que a madeira
que expomos para contar os aneis
co estremo da uña arredrada
á carne.
Distánciase na altura, mídese
na sombra.

Sostena
o ceo.
Pode caer.






O  gladíolo emerxe
nun decidido corte
ao vento,
coma espada.


Tras once abertas frontes
foi armado o cabaleiro
de amplos escudos de luz.


Cal de abellas do río
doou un signo de cor
para aquel que entre as túas mans xa gardas:

este, azúleo, case roto.





(Do libro Memorial e danza. XXVI Premio Nacional de Poesía XoseMaría Pérez Parallé. Editado por Espiral Maior. 2014)

REMUÍÑO DE LIBROS (50) "Street Poems", de Fran Alonso

$
0
0




TÍTULO:   Street Poems

AUTOR:  Fran Alonso



EDITORIAL: Edicións Xerais . COLECCIÓN: Sopa de Libros



   
Dende que lin Cidades, hai xa ben anos, comprendín que a poesía de Fran Alonso (Vigo, 1963), dirixida á mocidade, levaba unha orientación innovadora e estaba enfocada a presentar moitos camiños ao lectorado.
    
     E sucedeu, tamén, con aquela poesía que Fran Alonso escribiu para as primeiras idades. O meu gato é un poeta e Poemas birollos para ler cos ollos son un claro exemplo do que estou a dicir.
 
Fran Alonso
     Teño nas miñas mans un novo poemario deste autor vigués: Street Poems. De novo, convencionalismos fóra.  De novo, procurando o interese do lectorado mediante poemas para ver. poemas  para que se identifique coa realidade artística circundante calquera lector/a, para que sintan a proximidade dos textos tirados dos muros das rúas xunto cos seus propios. Uns serven de inspiración aos outros e a creatividade do poeta non ten cancelas.

     Todos eles están impregnados de rebeldía. Son golpes de voz dun certo carácter subversivo. Removen conciencias e non deixan indiferente a ninguén.

     Atopamos en Street Poemas fotografías que Fran Alonso foi facendo de textos e imaxes pintadas en muros e paredes. El mesmo explica a procedencia dos poemas nunha introducción ao poemario: Este é un libro que foi medrando aos poucos na miña cabeza. Comecei hai catro anos, fotografando aqueles graffiti ou intervencións de “street art” alí por onde pasaba, inicialmente de xeito esporádico e ao final de xeito sistemático.

     


     Si, porque o que Fran Alonso ía atopando (tags, murais nunha parede, edificio, vagón dun tren ou nunha árbore) converteuse, case sen querer, en intervencións que o levaron a crear este libro tan singular. O poemario dun autor atrevido que crea espazos de plástica e poesía con poemas gamberros, críticos, inconformistas.

     Un poemario de denuncia, reivindicativo cen por cen no que imaxe e texto desenvolven un papel que se converte en reto para quen entre neste mundo tan atractivo.
     

      Poesía na nova dimensión. Poesía visual en moitos casos. Poesía necesaria nunha contorna que precisa da creatividade en toda a súa extensión. A expresividade visual e a palabra indomable feitas poesía.

    
     Un libro para permanecer.

                                                                                                 ANTONIO GARCÍA TEIJEIRO

LA LITERATURA CRÍTICA O INDICATIVA DE CHRISTINE NÖSTLINGER (1936-2018)

$
0
0
Me escribe un mensaje de texto mi hermana Noa para comunicarme el reciente fallecimiento, el pasado 28 de junio, de la escritora austríaca Christine Nöstlinger, a los 81 años de edad. Y la triste noticia me retrotrae instantáneamente a mi niñez, cuando buceaba en las bien pobladas estanterías de la biblioteca de mis padres y leía con avidez muchos de sus libros en las traducciones españolas publicadas en colecciones que marcaron toda una época, como Juvenil Alfaguara, Austral Juvenil o El Barco de Vapor. Títulos como Un marido para mamá, Rosalinde tiene ideas en la cabeza, Konrad o Intercambio con un inglés son algunos de los que me vienen de inmediato a la memoria, leídos primeramente en voz alta por mi madre mientras mi hermana y yo cenábamos cada noche, y posteriormente por mí mismo, en silencio, tumbado sobre la cama o cómodamente sentado en el sofá de la sala de estar.




Los de Nöstlinger formaban parte de una serie de libros escritos en los años 70 y 80 del siglo pasado por un grupo de autores alemanes, austríacos y escandinavos, como Michael Ende, Astrid Lindgren, Tove Jansson, Maria Gripe o Peter Härtling, entre otros, que en mi opinión—al menos desde el punto de vista retrospectivo de hoy—, se encontraban muy por delante del resto tanto por las técnicas narrativas que utilizaban como por los contenidos de las novelas. Nöstlinger había nacido en Viena en 1936, justo al inicio de la II Guerra Mundial, y quedaría profundamente marcada por dicho conflicto. Su visceral antifascismo y sus ideas progresistas resultan evidentes en su producción literaria, como lo es también su tendencia a usar un lenguaje directo que conecta con facilidad con el público infantil y juvenil. Asimismo, los temas tratados en su obra son muy variados, y van desde aspectos sociopolíticos, educativos o familiares hasta el racismo, los derechos de la mujer o las relaciones sentimentales y sexuales entre jóvenes. La crítica la ha inscrito siempre dentro de la tendencia realista y social derivada de autores como Thomas Mann que caracterizó a buena parte de la literatura juvenil europea de su época, pero lo que realmente emerge en sus novelas es una literatura crítica o indicativa, esto es, que ofrece una visión eminentemente crítica acerca de la realidad circundante y cuyos temas serían en algunos casos impensables en los tiempos que corren, dominados por la censura posmoderna y el mito de la cultura.





Siempre que escucho el nombre de Christine Nöstlinger pienso específicamente en tres títulos que en su momento leí y releí constantemente: Querida Susi, querido Paul; Querida abuela... tu Susi y Diario secreto de Susi / Diario secreto de Paul. Los dos primeros contenían, respectivamente, la relación epistolar entre dos amigos, Susi y Paul, y las cartas que Susi remitía periódicamente a su abuela. El tercero presentaba extractos de los diarios íntimos de Susi y Paul, mediante los cuales se iban narrando historias y describiendo experiencias que los personajes iban viviendo y que a menudo estaban entrelazadas. En aquellos años previos a internet y al e-mail, para un niño que disfrutaba carteándose con varios penpals y escribiendo en un diario de tapas verdes y doradas que había recibido como regalo en un cumpleaños, aquellos tres libros fueron toda una revelación, hasta el punto de que yo quería emular en la vida real aquellas cartas escritas en letra cursiva o a máquina por Susi y por Paul. Desde la perspectiva que ofrece el paso de los años, no me cabe la menor duda de que fui muy afortunado por poder entrar en la literatura a través de la puerta que a ella me fueron abriendo Christine Nöstlinger y varios de sus ilustres contemporáneos, y no dudo en animar a quienes estén leyendo estas líneas a que se acerquen a su excelente legado literario.




                                                  ANTÓN GARCÍA-FERNÁNDEZ

REMUÍÑO DE LIBROS (51): "A pel do mundo", de Berta Dávila.

$
0
0







TÍTULO:A pel do mundo.



AUTORA: Berta Dávila.





ILUSTRACIÓNS: Alba Cid.


EDITORIAL: Galaxia. Colección: Árbore.




Berta Dávila, unha das novas voces poéticas e tamén narrativas destacadas dentro da nosa LIX, achégalles aos lectores a partir de doce anos este interesante e atraente poemario.

     A pel do mundo é un conxunto de vinte e nove estampas persoais,  a xeito de retratos poéticos, baixo o título de antropónimos de nenas e nenos que serven de coñecemento pero tamén abren a vía da reflexión do mundo no que vivimos.

     Trátase dunha viaxe cultural, xeográfica e persoal de vinte e nove protagonistas que representan as diferentes maneiras de vida dende a perspectiva  da ollada infantil .  Vinte e nove olladas do mundo circundante, pequeno pero básico para comprender a idiosincrasia particular dos diversos protagonistas.

     Protagonistas que soñan con abandonar o mundo de tonalidades grises, onde as máscaras da hipocrisía, a maldade, a miseria e a explotación cobren todo, e poder  atinxir o de cores rechamantes no que cadaquén poida ter voz e soños.

ADISU: “E cando lle preguntan de onde vén,/de onde son eses ollos seus/negros coma carbóns/pensa sempre/que o fogar son dous brazos de nube/e unha voz de cristal que di ”meu neno”.

OLIVIER: “Olivier é especial/desde o día que aprendeu da poesía/ que non é necesario/ correr coas pernas,/ cando se pode voar coa cabeza/ prendida no ronsel dun verso máxico.”

GIULIA: “E polas rúas estreitas/da cidade pantano/camiña desexando/non esquecer xamais/que ela é a principesa verdadeira/entre todos os bailes de mentiras/cos que está feito o mundo/no que vive.



     
     Explotación, miseria, emigración, ritmo frenético das sociedades industrializadas pero tamén a tenrura, o agarimo, o amor á natureza e o poder evocador das palabras teñen cabida nestes versos. Esa ollada-esponxa que cativa cuns versos carentes de rima pero cheos de ritmo nos que se debullan os gustos culturais e o amor pola lingua xunto ás reivindicacións sociais dos menos favorecidos.

     Versos necesarios para que a rapazada sexa consciente do mundo no que vive e amplíe a súa visión cara á humanidade tendo  o coñecemento como base imprescindible para crear un futuro máis xusto.

     Diferentes niveis de lectura, para os máis pequenos é un achegamento a diversas culturas e os textos explicativos que aparecen ao seu carón axúdaos non só a entender a pluralidade de vidas, senón tamén a situar no atlas xeográfico o país correspondente. Para os lectores de máis idade é unha porta aberta cara á reflexión.

     Alba Cid, na súa faceta de ilustradora, achega uhas ilustracións expresivas e detallistas , acordes co ton textual.

                                                                                                                         ALBA  PIÑEIRO



Viewing all 1127 articles
Browse latest View live